jueves, 4 de agosto de 2011

"Bielsa en plena protesta de los estudiantes"

Si algo define a Marcelo Bielsa no es su locura, sino su determinación.

Eligió Bilbao, equipo emblemático de la comunidad vasca, una institución que no incorpora jugadores extranjeros y sólo depende de sus divisiones inferiores. Bielsa es técnico de sistemas no de resultados, cree más en el proceso y eso requiere rigor, esfuerzo y trabajo. Su lenguaje es distinto, enseña, entrega valores y la consecuencia son los goles.
Bielsa es un profesor, transmite pasión que para muchos es locura, su voluntad se traspasa. Es tanto su desvelo por el proyecto que es imposible no contagiarse. Bielsa es viral, traduce la palabra “cambio” convirtiéndola en triunfo. Su labor en Chile es el mejor ejemplo: con trabajo, esfuerzo e inteligencia se pueden conseguir grandes logros.

Chile vive momentos de cambio. Los estudiantes se movilizan demandando calidad y gratuidad en la educación. En definitiva, igualdad. Parte del problema son los profesores y todos hemos sido de una u otra forma marcados por ellos. Unos trabajan en función de un sueldo y ven la docencia sólo como una ocupación. Otros, en cambio, se desvelan corrigiendo pruebas por vocación. Bielsa es parte de esa estirpe, un fanático, sufre de vocación enfermiza. Recibe a sus alumnos en la puerta de la sala, los acoge con sus virtudes y defectos, los convence de su proyecto y luego dedica mucho tiempo a enseñarles. En cierto modo, los nivela, rescata de cada uno sus mejores atributos y es capaz de descubrirles otros. Un buen profe detecta el talento y lo potencia.

Cuando pienso en Bielsa y hago la típica analogía del fútbol con el momento actual del país, me imagino un modelo educativo que no sólo someta a los alumnos a pruebas de rendimiento académico. Sueño con un sistema que identifique talentos, que potencie habilidades, que forme ciudadanos sobre la base de la razón y la emoción. Bielsa encarna esta alegoría, la del profe que, en el universo de un fútbol cada día más funcional al mercado, se las ingenia para hacerse un espacio, para poner a prueba sus locuras. Extrañamos a Bielsa por eso, porque gracias a la masiva exposición que genera el fútbol, y en particular la Selección, pudimos acompañar el proceso de ir concretando un proyecto basado en el rigor y la disciplina.

Pudiendo elegir entre múltiples tentadoras ofertas, el Loco escoge ésta, una que a todas luces calza con sus valores. Bielsa eligió educar a los jugadores del Bilbao y a una hinchada que, una vez terminado su periodo, lo recordarán igual que en Chile, atesorando aquellas lecciones de un loco profesor que marco nuestras vidas.

Aquí link de publicación en LUN
http://www.lun.com/Pages/NewsDetail.aspx?dt=2011-08-03&NewsID=151407&BodyID=0&PaginaId=20

3 comentarios:

Karmallirion dijo...

una gran columna, un gran recuerdo de un Loco que nos cambió de alguna manera, y una gran analogía con lo que está sucediendo en el país...

luischile22 dijo...

bueno bielsa solo esta con la gente y no con los poderes y elites que gobiernan este pais gracias tambien a mis compañeros de mi generacion que estan luchando por algo justo y necesario para que el pais sea desarrollado y eso solo se logra con educacion gratuita y de calidad y estoy seguro de que esta presion social lograra el objetivo de muchos que es la educacion gratuita

Anónimo dijo...

Por fin un periodista y tenia que ser mujer,que entiende que bielsa no se mueve por $ si no que por valores